miércoles, septiembre 27, 2006

Los Amigos

Ya que en Katovízate he hablado del mítico Mini Bar, aprovecho para hacer otra recomendación hostelera: Los Amigos. Los Amigos es un bar doble (tiene dos locales) de la calle de las Conchas, en Madrid, justo en frente y al lado del Japotalego (que vale, ya no sale a talego, pero casi), otra maravilla de la restauración a fin de mes.

A lo que íbamos, Los Amigos, son un bar y un restaurante que ¡normal que reciba ese nombre!, con esos precios y esas tapas, cualquiera hace amigos! Por el modiquísimo precio de 1,10 tienes lo que es más que una caña (aunque no llega a doble) y, lo que es más importante, un platazo con tapas enorme. Patatas ali-oli, tapa de tomate con boquerón, de jamón.. nada del otro mundo pero vamos, que sales cenao.

El sábado nos aposentamos ahí durante horas. Hacía años que por menos de mil pelas pasaba una noche tan estupenda con amigos, cañas y tapas. Y es que con todo eso, ¿quién quiere más?

viernes, septiembre 22, 2006

El vino, para casa

Uno de los mayores placeres de ir a un restaurante es comer o cenar con una buena botella de vino. Y es que, por mucho que seamos mileuristas, y sepamos que el 'vino sube mucho' la cuenta, cuando salimos fuera a cenar no nos resistimos a pedir una botella, o dos. Lo más divertido del mundo es intentar maridar los platos con los vinos apropiados, y, cómo no, bebérselos en buena compañía.

Sin embargo, hay gente que no se acaba las botellas. Es una cosa inexplicable, pero sucede, sobre todo ahora que el Gobierno se ha puesto duro con el carné por puntos. Claro, si conduces, lo ideal es no pasarse de la copita reglamentaria. Lo que hasta ahora más de uno habría pensado (joder, qué pena de vino, me llevaría la botella), ahora se puede hacer sin morir de vergüenza y con el beneplácito del propio restaurante.

La iniciativa El disfrute se prolonga en casa parte del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rioja (que no quiere que se paralice el consumo de vino) y la Asociación de restaurantes Euro-Toques (que tampoco quiere, porque se gana mucho dinero gracias a la carta de vinos). De momento sólo funciona con Riojas, que representan casi el 50% del total de vino que se consume en hostelería (los que más se piden).

Ya en más de 500 restaurantes del territorio nacional, si no te acabas la botella, podrás pedir una bolsita tan mona como la de la foto para llevártela a casa y terminártela cuando y como quieras. Y, aunque pueda parecer cutre, en otros lugares como Francia, país de vinos donde los haya, también se puso en marcha un proyecto similar en 2004 y ha tenido un gran éxito. ¡Desde luego, es una idea estupenda!

Vía El Buen Vivir

viernes, septiembre 15, 2006

El fabuloso té verde

Siempre es buen momento para redescubrir el té. Esta bebida milenaria, la más consumida en el mundo, después del agua, nos llega desde Asia con un excelente currículum: los habitantes de China y Japón, por poner dos ejemplos de países superpoblados en el Extremo Oriente, disfrutan de una salud y una longevidad a prueba de bombas.

Entre todas las variedades de té (negro, oolong, verde y blanco), el verde destaca su alto poder diurético. De hecho, se convierte en una de las mejores armas para combatir el sobrepeso. No sólo favorece la eliminación de líquidos, sino que estimula el metabolismo para deshacerse de las grasas. Se dice que incluso contribuye a reducir los casos de grasa localizada como la celulitis.

Pero si por algo destaca el té verde es por su altísimo poder antioxidante. Y en una vida como la nuestra donde la mala alimentación, el tabaco, el alcohol y el estrés están a la orden del día, no hay nada como una tacita de té verde para recuperar el oxígeno que nuestras células están pidiendo a gritos.

Gracias a su proceso de elaboración, donde no tiene lugar la fermentación (proceso que daría lugar al té negro), las hojas conservan gran parte de los polifenoles de la planta, responsables de ese poder antioxidante. Gracias a ellos, retrasamos el envejecimiento prematuro e incrementamos nuestras defensas frente a las agresiones externas.

Por si esto fuera poco, hoy me entero de una nueva noticia que añade más ventajas al consumo de esta saludable infusión. Un estudio elaborado en Japón, donde se ha analizado la región que bebe más té verde del país, demuestra que su consumo reduce la mortalidad por enfermedades cardiovasculares. En resumen, que los japoneses que beben unas tres tazas diarias de té verde viven más y mejor.

En fin, un motivo más para disfrutar de la tacita de té verde diaria, a pesar de que un consumo excesivo, según dicen los expertos, dificulta la absorción de vitamina B1 y hierro, y puede provocar nerviosismo. Desde luego, en pequeñas dosis, es un despertador ideal, que despeja y activa nuestro cerebro gracias a la teína (que en la variedad verde es muy reducida).

Por último, recomendaciones para hacer un té en condiciones: no dejes que hierva el agua (que si es mineral, mucho mejor). Si llega a ebullición, tanto el agua como el té pierden propiedades. Pon el té unos segundos antes de que empiece a hervir y respeta los tiempos de infusión que indiquen en el paquete. Ten en cuenta que, cuanto más tiempo dejes en infusión el té, se reduce el contenido en teína y aumenta el amargor del mismo, debido a que el contenido en taninos se incrementa.

Ahora que el otoño empieza a asomar su cabecita, nada mejor que una tacita caliente de té verde y... a disfrutar.

viernes, septiembre 08, 2006

Tontería máxima: pincho de patata y chistorra

Se coge una patata, se pela y se hacen rodajas finas (aunque no demasiado: de unos 3mm). Se fríen para que queden patatas fritas caseras, no demasiado duras.
Freímos también la chistorra.
Con un palillo pinchamos una patata frita y un trozo de chistorra. Nos queda un pincho la mar de rico y aparente. Y ya ves, una tontáaa de hacer!
Por cierto que el invento la caté ayer en El Pico ese maravilloso bar de Divino Pastor esquina Ruiz: amabilidad, tapas, y unas raciones muy ricas. Lo tiene todo.